miércoles, 12 de junio de 2013

Cuéntame un cuento ... IX



Diseño de Louboutin para Cenicienta
 
 
La Cenicienta que no quería comer perdices
La cenicienta tenía tantas tantas ganas de ir a la fiesta que finalmente lo consiguió. Pero se puso tan ansiosa que a la mañana siguiente no se acordaba de nada. Pero ahí estaban esos dos señores, con el zapato de cristal de tacón de palmo y de punta esperando para que se lo probara. Al principio no le cabía el pie pero apretó y apretó hasta que le cupo.
 
¡Porque se tuvo que casar con el príncipe! Al príncipe le encantaba las perdices,pero la cenicienta era vegetariana, no comía ni carne, ni pescado, ni llevaba chupa de cuero, aún así tenía que cocinar las perdices porque era la comida preferida del príncipe. "¡Están frías, crudas, malas!" Gritaba el príncipe malhumorado,porque nunca cocinaba las perdices a su gusto. Y lo peor: ¡Tenía que ir subida en los zapatos de cristal!La cenicienta cada vez se encontraba peor.
 
Un día decidió contarlo. ¡Que rollo de príncipe,y de zapatos y de perdices! Ella se fue del palacio.Sólo tenía a su príncipe "amado", la espalda torcida, los pies chafados y el corazón roto.Tuvo suerte de verse, en la perdicería,y le dio por reírse de si misma, de lo inocente que había sido pensando que un príncipe la salvaría. Después de años viviendo con uno, se había dado cuenta de que los príncipes no te salvan... Dejó de sentirse culpable, se perdonó y se dio cuenta que la única capaz de salvarla era ella misma.
 
Ella abrió un restaurante - cabaret vegetariano, que triunfó, donde además de hacer de comer, no paraban de bailar. Y por fin,este cuento acabó con un fin.
 
ISABEL BAUTISTA, ANA GONZÁLEZ, CLAUDIA LAMONEDA, RAFAEL SILVA

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